lunes, 5 de octubre de 2009

El Polvorin

-Identificación -Esa fue la única palabra pronunciada mientras dos soldados uniformados y con un brazalete negro en el brazo apuntaban sus rifles de asalto en dirección a mi pecho mientras un tercero clavaba en mi su mirada con una arrogancia fuera de lugar. No eran mas que simples centinelas y por el numero de estrellas en su brazalete sabia que no llevaban mas de un año en el polvorín. Aun así si mi respuesta no era la adecuada no tendrían ningún problema a la hora de llenarme el pecho de plomo.
-Brigada especial, numero 204 E -No había ninguna necesidad de darles mi nombre, ni tampoco ellos lo esperaban. No hubo respuesta. Para alguien ajeno a la estructura del polvorín podría resultar extraño ver que no se tomaba ninguna medida en respuesta, pero yo sabia que detrás de la puerta del bunker un escriba tenia la oreja puesta en nuestra conversión y en estos momentos buscaba mi ficha en el registro de tropas. Luego llegarían las preguntas, sin duda muchas de ellas complicadas de responder. Abrieron el portón.
-Acompañenos.

Me encontraba ahora en lo que llamábamos la "sala de espera" (un pequeño conjunto de celdas próximas a la entrada del bunker), posiblemente a la espera de que algún oficial me interrogase. En el polvorin no ven con buenos ojos que uno de sus soldados, y mucho menos un agente de élite desaparezca durante un año. Para cualquier otro la pena seria la muerte, pero yo manejaba suficiente información para evitarme todo eso. Siempre me había gustado ir por libre, y mientras los resultados sean favorables, al General no le compensa perder mis servicios.

- Agente especial John Shepherd, numero de identificación 204 E. No esperaba verle por aquí.
- ¿Puedo saber con quien estoy hablando? -Mi voz sonó firme a cada pulso. Apenas dos o tres personas en la ciudadela recibían mi respeto, aunque posiblemente lo merecieran muchas mas.
- Aquí las preguntas las hago yo señor Shepherd. Y no debería jugar demasiado, su situación pende de un hilo. Hace un año que fue enviado a una misión que según mis informes no debería haber durado mas de una semana. ¿Tiene alguna respuesta para esto?
- ¿Se encuentra el General en la base?
- Responda a la pregunta señor Shepherd
- No estoy autorizado para revelarle mis informes a nadie mas que al General
- Responderá ante mi, asique conteste a la pregunta señor Shepherd, ¿que razón hay para que no regresase a la base al igual que hicieron el resto de su equipo?

Me quede desconcertado. Mis compañeros habían fallecido cuando regresábamos a la base, yo mismo vi como los pasaban por el cuchillo aquellos jodidos mercenarios. La emboscada hubiese sido perfecta de no ser por la pura casualidad de encontrarme peinando la zona en busca de alguna amenaza cuando ellos cayeron encima del campamento. No hubiera podido hacer nada, fue todo tan rápido... Pero pude ver como quemaban los cadáveres y nuestras pertenecias. Nos superaban ampliamente en numero.

- Lo siento Teniente Beck, pero no puede responder ante usted. - La mirada del oficial cambio completamente en apenas tres segundos, dejando atrás todo rastro de arrogancia por este recién adquirido brillo de sorpresa

2 comentarios:

  1. Vaya, no sabía que vosotros también le dieseis al rollo de los relatos cortos. De momento me está molando, ¡suerte!

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  2. buah q movida es leer sto aun piripi XDDDDDDDD

    ostia! cuando empece a leer pense q lo escribiera stan tio XD

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